Según constataron los profesionales de la Corporación Nacional Forestal de la Región del Maule, el caudal está regresando lentamente a las tazas, después de que éstas quedaran vacías producto de una fisura en la roca en la parte superior de este monumento de la naturaleza.
Con el sismo, dos de los principales atractivos del Parque, las Siete Tazas (siete caídas sucesivas de agua) y la cascada de 20 metros de altura denominada Salto de la Leona, perdieron por completo el torrente, surgiendo nuevamente unos 400 metros más abajo.
Profesionales del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) visitaron la zona, con la finalidad de estudiar el fenómeno y evaluar la situación, condición que aún se encuentra en proceso.
Miguel Ángel Rojas, Director de CONAF Región del Maule, indicó al respecto que “creemos que lo ocurrido responde a que la disminución del caudal debido al terremoto hizo insuficiente el torrente para superar el grado de infiltración normal, situación que actualmente se está revirtiendo, ya que en estos momentos el pozón se encuentra saturado de agua. Ello posibilita la caída de agua a las otras tazas”.
Señaló, además, que existe una gran probabilidad de que una vez que comience el período de lluvias, se normalice plenamente el flujo, retornando así los saltos de agua tan característicos del lugar y que le dan el nombre a este Parque Nacional.
